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| S, Scholz, M. Reginato (h), R. Bollero, M. Reginato |
Esta no es una carrera más, esta es "la carrera”, la más difícil del mundo, la más exigente, la más dura… y acá estamos con Los Peraltes Racing Team por tercera vez, nuestro equipo chiquito y amateur soñando un sueño de grandes, poniéndonos a la altura de equipos monstruosos y profesionales. Imposible no sentir adrenalina y mucha emoción a la vez, imposible no pensar en este gran desafío que nos espera…
Rodolfo Bollero y Sebastián Scholz, visiblemente conmovidos, salieron del hotel cerca del mediodía para asistir al briefing obligatorio para pilotos y copilotos. En esa reunión multitudinaria pilotos consagrados como Marc Coma, Cyril Despres o el príncipe qatarí Al Atiyah se mezclan con el resto de los pilotos como uno más. En ese momento no hay diferencias de títulos, ni de nacionalidad, ni siquiera de presupuesto. Todos van a vivir la misma experiencia, con la misma intensidad, con la misma tierra, con el mismo cansancio, y hasta con los mismos miedos. Si, miedos también, porque aunque no lo digan y piensen sólo en ganar, el mayor miedo es no llegar.
Mientras piloto y copiloto compartían estos momentos inolvidables, el resto del equipo preparó los vehículos para la salida rumbo a Santa Rosa, el primer bivouac. Nosotros también tenemos nuestro Dakar, el equipo externo también cumple funciones importantes. Tenemos que viajar cientos de kilómetros a diario, instalar campamento, conseguir provisiones. También ocuparnos del bienestar de piloto y copiloto cuando lleguen, y eso sin mencionar nuestros miedos y nuestras preocupaciones, ni siquiera el cansancio. Dentro del bivouac, acreditados como mecánicos, Gustavo Cisneros y Federico D’Amato cumplirán con su trabajo en total soledad, sólo acompañados por el ruido contante de motores y de grupos electrógenos que funcionan día completo. Muy pocas veces se cruzarán con el resto del equipo, porque es fundamental para ellos la tranquilidad y la concentración, pero sí vivirán todo esto con mucha plenitud, ya que interactúan con gente de todas partes del mundo, y aprenden permanentemente de lo que hacen los grandes equipos, de los que estamos a años luz, pero igual lo intentamos.
Algo muy similar están viviendo Miguel Reginato y su equipo. Ellos seis en Mar Del Plata, el resto de su gente en Tucumán, vivirán un fin de año atípico y en soledad, luchando contra las emociones y grandes equipos. Saben a lo que se exponen, pero tienen un sueño y lo quieren concretar. Quieren vivirlo a pleno y van a dar lucha. Quieren mejorar posiciones y saben que lo pueden lograr.
Muchos sueñan en grande. Sueñan con ganar, con ser top ten, con estar en lo más alto del podio. Para nosotros, lo importante no es ganar, sino llegar a la meta, que no es poco. Es haberse preparado año completo para esta aventura, es haber recorrido más de 10.000 kilómetros es haber podido solucionar problemas a medida que fueron surgiendo, y es haber soñado y haber soñado de a muchos, porque si bien somos 12 los que viviremos esta experiencia, nada de esto habría sido posible sin el apoyo de nuestra gente, nuestras familias, nuestros amigos, nuestros sponsors y también, por qué no, de cada persona que nos acompañó en este gran proyecto, nos alentó, nos ayudó y hasta nos dio fuerzas cuando todo parecía muy difícil.
Los Peraltes Racing Team empezará este nuevo año con una nueva ilusión, y un nuevo desafío. ¡Gracias por acompañarnos! ¡Gracias por apoyarnos!
Bitácora de viaje
Con las emociones a pleno, el día de hoy fue extenuante por la gran espera a la que no estábamos acostumbrados. La largada simbólica nos pareció emotiva pero interminable. Primero largaron los quads, luego las motos, y mucho más tarde los autos.
A las 18:45 recién le permitieron Ro y Seba poder acercarse al auto y arrancarlo. Después de las 19, por fin fue el turno del equipo de los tucumanos Reginato con el número 421 y, minutos más tarde, de Bollero-Scholz con el 455. Salieron de parque cerrado a bordo de sus vehículos y recorrieron el trazado especialmente preparado para que "La Feliz" pueda vivir a pleno esta gran fiesta. Más tarde, luego de volver a parque cerrado, será el momento de compartir una cena liviana y simple y brindar (con agua o gaseosa) para recibir este nuevo año que se viene lleno de emociones.
El 1 de enero, a las 8, será el momento de despedirnos. Rodolfo y Sebastián, partirán rumbo a parque cerrado para subirse al "Tanque Chicharito" y recorrer más de 800 kilómetros para llegar a Santa Rosa. El equipo de asistencia, tendrá su ruta, obligatoria y marcada por la organización, para llegar al mismo destino. Y nosotros , con nuestras camionetas, elegiremos nuestra ruta, la menos transitada, para viajar tranquilos con nuestras casillas. El equipo casi completo, ya sin Agostina, que por razones laborales se dirigirá a Buenos Aires, empezando esta aventura con todas las ganas y con toda la garra.
Info La Gaceta
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